lunes, 30 de mayo de 2016

Tú decides


Una de las cosas que me fascinan de la vida es que los mensajes y las enseñanzas que tienen que llegarte, te llegarán. De la forma que sea y a través de los mensajeros más insospechados, pero te llegarán.

Mi amiga Pia ha compartido últimamente un par de vídeos que me han gustado y que quiero compartir juntos porque, de alguna forma, tengo la sensación de que se complementan.

En el primero de ellos, un trozo de una antigua entrevista a David Bowie, el famoso cantante afirma que uno debería trabajar para llegar a manifestar algo muy profundo sobre sí mismo, y que debería hacerlo sin tratar de cumplir con expectativas ajenas. Además, señala que “si te sientes a salvo en el área en la que estás trabajando, no estás trabajando en el área correcta”. Y, por ello, recomienda que nos adentremos en el agua hasta sentir que casi no tocamos el fondo, porque justamente ese es el lugar desde el que podemos empezar a hacer algo emocionante.


El segundo vídeo pertenece a la película “The Ramen Girl”. En él, una anciana sabia nos recuerda que para cocinar no sólo es importante conocer la técnica sino utilizar el corazón. “Cocinas con la cabeza”, le dice a la joven, “y tu cabeza está llena de ruido. Debes aprender a cocinar desde un lugar más tranquilo, muy en el fondo de ti. Cada plato que cocinas es un regalo para tu cliente, la comida que les sirves, se vuelve parte de ellos. Contiene tu espíritu. Es por eso que tu comida tiene que ser una expresión de amor puro. Un regalo de tu corazón”.



Creo que todo ello se puede aplicar al trabajo, a la cocina y a cualquiera de las cosas que hagamos en el vida, porque cada uno de nuestros actos es una expresión de quiénes somos y manifiesta algo muy profundo sobre nosotros. Tú decides si te expresas desde el ruido o desde la calma. Tú decides si prefieres utilizar la mente o el corazón.

4 comentarios:

  1. Tienes un blog tan bonito!!es mi momento de meditacion de cada mañana con mi primer cafe del dia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchísimas gracias, Rocio!!! Me ha encantado tu mensaje... Un abrazo fuerte. <3

      Eliminar
  2. Lo de la mujer japonesa combina con aquella expresión que dice: " Dios puede hacer milagros
    con tu pan ( tu tiempo, etc. ), basta que no lo mezquines ". El tiempo, como el pan, puede
    ser de gran alimento para los demás.Depende de cómo lo amases...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No conocía la expresión, muchas gracias, anónimo. Es verdad que el pan depende de cómo sea amasado y de quién lo amase. Al final, creo que es como todo, depende de cuánto amor pones en lo que haces. Un abrazo.

      Eliminar

Tu comentario es una buena noticia...