Creo que todos, de pequeños, hemos jugado alguna vez al “pilla pilla”. Es un juego de lo más simple, todos corren y uno persigue. Pero, cuando era niña, lo que más me gustaba de este juego era que había un lugar que se llamaba “casa”. Y me gustaba porque era el lugar donde estabas a salvo, donde no te podía pasar nada. En el “pilla pilla”, ganabas cuando llegabas a casa.
Y ahora que soy mayor (¿?) he descubierto que hay lugares y hay personas que son “casa”. Lugares y personas que te recuerdan que no estás sola. Lugares y personas que te hacen sentir a salvo.
Casa es allí donde cuidan de tu corazón y de tu alma.
A casa no se va, a casa siempre se vuelve.
Y ahora que soy mayor (¿?) he descubierto que hay lugares y hay personas que son “casa”. Lugares y personas que te recuerdan que no estás sola. Lugares y personas que te hacen sentir a salvo.
Casa es allí donde cuidan de tu corazón y de tu alma.
A casa no se va, a casa siempre se vuelve.
Y este fin de semana yo he vuelto a casa. Gracias. A todos los que ahí estabais.
Me gusta mucho tu sensibilidad. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, querida Emejota. Un abrazo para ti también. Enormeeeee.
ResponderEliminarQue hermoso, sobre todo me gusta la ultima frase "a casa no se va, a casa siempre se vuelve" Que gran verdad!!! Me encantó.
ResponderEliminarUna entrada preciosa!! Muchos abrazos. Anouna
¿? vuelves a casa??? yo se de unos que te esperan congelados por la nieve en un pueblo perdido :)
ResponderEliminarEncontrase un mismo debe ser genial, no?
Besos congelados
Muchas gracias, querida Anouna. A mí me sucede que, cuando me siento en casa, el alma está tranqula y, en el fondo de mi corazón, sé que estoy donde tengo que estar, que por fin, he regresado...
ResponderEliminarUn abrazo inmenso, amiga.
jajjajaa, ya me han dicho que ha hecho un frío brutal por allá arriba, Dani. Regresaré, regresaré, no sé cuándo pero lo haré, jajajjajaja
ResponderEliminarNo sé muy bien qué decir de esto de encontrarse a uno mismo.... Creo que el trabajo más interesante que se puede hacer aquí y ahora es tratar de conocerse uno mismo, día a día, irse descubriendo aunque no sé si alguna vez llegas a encontrarte del todo ;-)
Pero, en eso estamos....
Besos hogareños.
Sabes que hay una persona muy especial a la que yo siempre le digo que es "casa"? Y es por lo mismo que explicas... Es genial estar en casa, y lo mejor es que la podemos crear aún estando lejos.
ResponderEliminarUn montón de besos, querida...
CMQ!!!!! Toda la razón del mundo. Muchísimos besos para ti también. Sabes que te quiero, ¿verdad? Aunque últimamente hablemos poquito... espero que estés FELIZ!!!
ResponderEliminarPues sí, ese sitio al que siempre se regresa, es la mejor definición de hogar, casa, o patria... Curiosamente, es la segunda vez que lo leo en los últimos días... una a ti y la otra a Mario Vargas Llosa, en su dicurso del Nóbel. Las dos veces me he emocionado, Elenita.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande.
.. entraba en busca de buenas noticias.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el escrito. Cuánta razón.
Muy profundo.
Muchísimas gracias, querida Cristal. Por cierto, a ver si nos vemos tranquilamente, tienes que ponerme al día.... Espero que sigas tan y tan feliz como la última vez que nos vimos ;-)
ResponderEliminarUn abrazo enorme para ti también.
Hola horabaixa, muchísimas gracias, me alegra que te haya gustado la entrada.
ResponderEliminarUn beso enorme.
cierto... esos lugares que nos acogen incondicionalmente son el hogar...
ResponderEliminarbesos miles querida Elena ;)
Besos a montones también para ti, querida Isis. Hasta en el blog se pueden encontrar pedacitos del hogar ;-) Todo mi amor para ti, preciosa.
ResponderEliminarGracias a ti por venir, participar y ser la reina de la tómbola!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo sister,
jajajjaja, me lo pasé genial, hacía tiempo que no me reía tanto.
ResponderEliminarMuaaaaaaas. Te quiero, brother.
Gracias a tí por venir!
ResponderEliminarLa Gran Tómbola Mundial ha sido una fiesta contigo en ella.
Un abrazo enorme.
Repetiremos, repetiremos, Mukunda... jajajaja, pero si tenemos hasta un club de fans!!!! ;-)
ResponderEliminarOtro abrazo para ti. Bien fuerte.
Además te ha quedado muy navideño, ya lo decía el anuncio de turrón cuando yo era pequeña y han pasado...¿28 años? Claro que sí, a casa se vuelve!
ResponderEliminarUn beso
jajjajaa, mira, no había caído en el turrón. Y eso que marcó nuestra adolescencia... Un abrazo, Misón.
ResponderEliminarNo puedo estar más de acuerdo contigo, Elena. De hecho, quizá el mismo sentimiento que te motivó a escribir esta entrada es el mismo que me empujó a escribir la mía: "Mi casa" .
ResponderEliminarEs bueno saber que siempre hay una casa a donde volver. Y puedo decir que este post que has escrito es tan acogedora, como una casa, como tantas entradas que también has publicado.
Muchísimas gracias, patyna127. Voy a leer tu entrada, seguro que me gustará. Un abrazo.
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