(Imagen de google)
"Temía
estar solo, hasta que aprendí a
quererme a mí mismo.
Temía
fracasar, hasta que me di
cuenta que únicamente fracaso cuando no lo intento.
Temía
lo que la gente opinara de mí,
hasta que me di cuenta que de todos modos opinan.
Temía
que me rechazaran, hasta que
entendí que debía tener fe en mí mismo.
Temía
al dolor, hasta que aprendí que
éste es necesario para vivir.
Temía
a la verdad, hasta que, hasta
que descubrí la fealdad de las mentiras.
Temía
a la muerte, hasta que aprendí
que no es el final, sino más bien el comienzo.
Temía
al odio, hasta que me di cuenta
que no es otra cosa más que ignorancia.
Temía
al ridículo, hasta que aprendí
a reírme de mí mismo.
Temía
hacerme viejo, hasta que
comprendí que ganaba sabiduría día a día.
Temía
al pasado, hasta que comprendí
que es sólo mi proyección mental y ya no puede herirme más.
Temía
a la oscuridad, hasta que vi la
belleza de la luz de una estrella.
Temía
al cambio, hasta que vi que aún
la mariposa más hermosa
necesitaba
pasar por una metamorfosis antes de volar.
Hagamos que
nuestras vidas cada día tengan mas vida, y si nos sentimos desfallecer, no
olvidemos que al final siempre hay algo más.
Hay que vivir ligero porque el
tiempo de morir está fijado. La muerte está tan segura de su victoria, que nos
da toda una vida de ventaja. No la desaprovechemos."
(Atribuido a Ernest Hemingway)
(Muchas gracias a
Leonor)
Muy buen poema :) me ha alegrado el dia,no lo conocía gracias por compartir y buena semana.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, Leonor. No estoy muy segura de que sea de Hemingway pero me lo enviaron firmado por él, así que lo he mantenido.
EliminarUn abrazo y buena semana para ti también.