Para Alex,
ojalá tengas una vida llena de sonrisas.
Hace unos días nació Alex, el hijo de mis amigos Eva y Joaquín. Fui a conocerle inmediatamente, creo que no tenía más de 12 horas cuando lo vi por primera vez y, de todas las cosas que me llamaron la atención sobre él, la que más me impactó fue que sonreía. Sí, tenía 12 horas y sonreía. Claro, al verlo sonriendo, mi cara se iluminó.
Y me quedé pensando en las sonrisas. Hace un tiempo hablé de este tema, cuando explicaba el porqué de la imagen que acompaña este blog “Your smile keeps us going”. Pero hoy quiero volver a hablar de ello porque, unos días después, mi amiga Laura me envió (mil gracias) un mail para contarme algo que le había alegrado el día: estaba en el supermercado, sección lácteos, cuando un mensaje le llamó la atención: “Ya hay demasiada mala leche en el mundo, SONRÍE”. Se trata de la nueva campaña de la leche Kaiku, que ha creado un “Movimiento contra la mala leche” para intentar recordarnos la importancia de sonreír, de disfrutar de la vida, de ser felices. Me parece un buen lema para una campaña…
La otra tarde, mi amigo Albert me hizo llegar (mil gracias) la foto de este post: “You look beautiful when you smile… Yes, YOU!!” (Estás guapísima/o cuando sonríes… Sí, ¡¡¡TÚ!!!). No voy a entrar a hablar sobre los beneficios de sonreír que, por lo visto, mueve nosécuantos músculos, estimula nosécuantos órganos y favorece las relaciones sociales –esto último es evidente-, pero sí quiero recordar lo guapísimos que estamos todos cuando sonreímos. Y eso es una muy buena noticia.
Lo decía entonces y lo repito ahora: cuando sonríes, la vida cambia de color, todo a tu alrededor se vuelve mucho mucho más luminoso. ¿A qué esperas, pues?
¡¡¡SONRÍE!!!
(Aunque tengas pocas ganas...)
Smile, without a reason why...
ResponderEliminarUna sonrisa y un beso, queridísima.
Otro para ti, preciosa. Bien grande.
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