Andaba el otro día preguntándome cuál es la misión de mi
vida, cuál es su sentido. Y me llegó una respuesta de la mano de mi amiga Magda
(mil gracias), que colgó un texto en Facebook de la
página web Buscándome, de Francisco de Sales:
"En realidad, la misión de vida se cumple muy
fácilmente: viviendo. Siendo consciente de tus decisiones, pensamientos y tus
creencias limitantes. Buscando la forma de erradicar los miedos que te impiden
ir más allá para descubrir la vida que anhelas. Hace mucho tiempo, antes de
nacer, todos, cada uno de ustedes, decidió como alma entrar en un cuerpo, para
experimentar el juego de la vida. Para volver a redescubrir su propio
conocimiento de la creación. Parte del juego consiste en trascender las limitaciones
externas y las creencias que han conformado tu mundo. No vivimos para cumplir
con nuestra misión… nuestra misión es vivir y descubrir. (…) No busquen el
propósito de su vida, encuéntrelo en el vivir."
Y, poco después, Fran (mil gracias) colgó un maravilloso
vídeo de Karsten Ramser, titulado “La mirada interior”.
“El
sentido de la vida es la vida.
Tú
eres la vida.
Todo
lo que debes saber,
está
en tu interior.
Plenitud
y paz no es algo que haces,
es
lo que eres.”
Y… parece que, por fin, empiezo a entender. El sentido de la
vida es la vida misma. Vivirla y sentir la paz, la plenitud. Permitir
que se manifieste Eso que verdaderamente soy. Perfecta Brillante Quietud.
Es increíble la cantidad de puntos de vista para una misma cosa, vivir,
ResponderEliminarme ha gustado la entrada y el video muy bueno.
Besicos
Muchas gracias, Ana. Un abrazo fuerte.
Eliminarhola, por aquí vengo a leerte, buena cita la de la semana.
ResponderEliminarSobre la vida, te gustará, "vidas llenas de vida" http://ow.ly/qssMp
saludos
Me alegra que te guste la cita, hana, la descubrí hace poco y me flipó….
ResponderEliminarY me ha encantado el vídeo que envías, qué buen rollo!!!! Lo compartiré en un post. Un abrazo grande y mil gracias.
Como siempre, totalmente de acuerdo contigo, hermosa.
ResponderEliminarTe quiero mucho mucho.
Yo también a ti, Siberiana de mi corazón. Y te mando un fuerte abrazo.
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