lunes, 8 de agosto de 2011

El alma viajera

Copley Fielding: "Sailing boat in a storm"

Para Eva y Joaquim...


El otro día, en el blog de mi amiga emejota -con la que comparto “mentores”- me encontré frente a otro de los míos, el gran Khalil Gibran. El texto que sigue pertenece a su libro El profeta:

“Vuestra razón y vuestra pasión son el timón y las velas de vuestra alma viajera.
Si vuestras velas o vuestro timón se rompieran, no podríais más que agitaros e ir a la deriva o permanecer inmóviles en medio del mar. Porque la razón, gobernando sola, es una fuerza limitadora, y la pasión, desgobernada, es una llama que se quema hasta su propia destrucción.
Por lo tanto, haced que vuestra alma exalte a vuestra razón a la altura de la pasión, para que sea capaz de cantar.
Y dirigir vuestra pasión con el razonamiento, para que pueda vivir a través de su diaria resurrección, y como el ave fénix, elevarse de sus propias cenizas.”


Me gustó releer este texto. Me gustó pensar en la vida como un gran mar por el que navega mi alma viajera. Me gustó recordar que el timón y las velas del mismo son mi razón y mi pasión. Pero, sobre todo, me gustó comprender que yo soy la capitana de mi propio barco y que el reto consiste, justamente, en aprender a manejar tanto el timón como las velas de la forma más adecuada posible para que, hasta en las más furiosas tempestades, mi velero se mantenga a flote… y continúe navegando.

22 comentarios:

  1. En efecto: nosotros manejamos ese timón en el mar. A pesar de ser la tarea más difícil de este mundo, resulta ser altamente recomendable y satisfactorio :)

    Mucha luz, bella.
    Todavía no me llega el libro, pero a no puedo esperar :D


    Te quiero.

    ResponderEliminar
  2. Totalmente de acuerdo, preciosa Siberiana.

    El libro.... ya debe estar a punto de llegar. A mi amiga de Ecuador le llegó hace un par de días y salieron al mismo tiempo.

    Yo también te quiero! Un beso enorme for you.

    ResponderEliminar
  3. Muy bonito, yo también suelo encontrarle analogías a la vida con el mar, estoy en parte de acuerdo con lo que dices sobre ser el capitán de tu propio barco, pero también es cierto que en la tormenta no hay muchas opciones y tomar la equivocada puede hundirnos.

    ResponderEliminar
  4. Si tenés destino el camino se muestra facil, con obstaculos, pero se muestra.

    ResponderEliminar
  5. ¿Existe la opción equivocada, Outsider? Me lo pregunto...
    Bueno, lo que sí está claro es que en la tormenta se hace más complicado que cuando las aguas están en calma pero puede suponer un reto interesante, ¿por qué no?

    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  6. Hola Tom, bienvenido y gracias por el comentario. Estoy de acuerdo que cuando tienes un puerto al que dirigirte, al menos sabes hacia dónde orientar tus pasos. Y eso, sí, es una gran ayuda.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  7. A mí también me ha gustado siempre la metáfora del mar. Todos podemos controlar nuestro barco, (lo malo es cuando nos sentamos cerrados en la idea del oleaje;, ahí volvemos a la idea de responsabilidad que dijimos)

    Y mejor aún es que cuando controlas tu barco, influyes el oleaje de tu alrededor, y eso también mueve a los barcos que hay cerca, jarl. (La metáfora es infinita, jarl)

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  8. Me encantó tu metáfora infinita, Sternn. Y, como dices, no hay que perder de vista el tema de la responsabilidad... ;-)
    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  9. Es genial tenerte a nuestro lado.....
    Te quiero mucho.

    eva

    ResponderEliminar
  10. ¡Hola Elena! Qué buena enseñanza compartes hoy.
    Me queda pendiente escribirte un email con más detalles sobre el viaje a Barcelona.
    Y otra cosa: acabo de ver en el blog de Mariana (espérame en siberia) tu libro. Me encantaría conseguir una copia, mañana me acercaré a las librerías a preguntar.

    Un abrazo gigante :)

    ResponderEliminar
  11. Sí, se aprende mucho de los naufragios, Joaquín, totalmente de acuerdo. Bienvenido y gracias por el comentario. Un beso.

    ResponderEliminar
  12. Yo soy feliz de que compartamos el camino, Evita. Os quiero un montón. Beso enooooorme.

    ResponderEliminar
  13. Mil gracias, Lucía! Esperaré ese mail y a ver si la próxima vez podemos encontarnos, sería estupendo. O, ¿quién sabe?, igual podría ir a Valladolid a presentar el libro, ¿por qué no? Ojalá surja la oportunidad.
    Ya me dirás si lo encuentras. Me han dicho que en las librerías grandes (cadenas) hasta septiembre no lo tendrán pero en las otras se puede pedir porque la distribuidora ya los tiene. Espero que lo encuentres, cuéntame, ¿vale?
    Un abrazo fuerte y gracias por el interés.

    ResponderEliminar
  14. ¡Qué hermoso saber que estoy en la página 30 de tu libro! Diossss.
    Cuando lo leí no pude evitar sonreír de oreja a oreja de la emoción. GRACIAS, Elena.


    Te quiero mucho.

    ResponderEliminar
  15. ¡Que has escrito un libro! y yo sin saber nada. Le deseo la mejor de las venturas. Bueno y que voy a decir más, que me da mucho gusto encontrarme por la red personas tan lindas como tu que me mencionan en su blog y que da mucho gusto beber agua fresca de fuentes tan limpias. Besazo.

    ResponderEliminar
  16. A mi me encanta, Siberiana. Porque tu selección de textos siempre ha sido una inspiración.
    Yo también te quiero, preciosa. Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  17. jajajjaaja, emejota, mil gracias por los buenos deseos para mi libro. Ya te contaré....

    A mí también me encanta encontrarme por la web a personas con las que comparto tantas cosas, a pesar de no conocernos personalmente. Es mágico, ¿verdad?

    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
  18. Hola, descubrí tu blog por el post de Espérame en Siberia donde explicaba que había recibido tu libro...

    Me ha gustado mucho esta entrada, es bien cierto, navegamos por el mundo y nuestro primer objetivo tiene que ser aprender a llevar el timón de nuestro velero. Me gusta el hecho que el viento sea quien nos impulse, el viento es el deseo, el deseo de hacer cosas, de sentir, de vivir, de amar...

    Un saludo y encuentro precioso el nombre de tu blog, sería realmente genial que existiera un periódico así, donde las notícias fueran solo buenas!

    ResponderEliminar
  19. Hola Barcelona m'enamora, bienvenida y muchas gracias por el comentario. Me alegra que te haya gustado la entrada y el nombre el blog. Voy a ir a conocerte.
    Un beso.

    ResponderEliminar

Tu comentario es una buena noticia...