lunes, 28 de mayo de 2012

Disolver el ego


(Imagen de google)
Gracias a Devi por el texto.


12 MANERAS PARA "DESTRUIR" TU EGO:

1) No lo puedes destruir es tu maestro.

2) Sólo lo puedes trascender y transformar, si lo observas.

3) Toma consciencia de las limitaciones que tienes, son su obra.

4) Localiza las falsas creencias que te implantó, tu sufrimiento te las revela.

5) Evita los hábitos, son su herramienta para mantenerte inconsciente y controlado por tu mente.

6) No te dejes convencer de que posees lo que tienes, solo disfrútalo.

7) Vive con desapego, con divina indiferencia, así evitarás sus deseos obsesivos y su codicia.

8) Bájate de la nube, la vida no es una competencia olímpica.

9) Deja de verbalizar y juzgar todo lo que ves, sólo contémplalo como testigo y goza.

10) Ama sin pretender cambiar a quien dices amar.

11) No aceptes pensamientos negativos, así te induce al sufrimiento.

12) Vive como en un juego de niños: entrégate totalmente y serás feliz, lo que disolverá tu ego.

jueves, 24 de mayo de 2012

Cuando juzgas...


Cuando juzgas a otro,
no lo defines a él,
te defines a ti mismo.

(Wayne Dyer)

miércoles, 23 de mayo de 2012

You should be dancing

Me recuerda Marta lo bueno que es bailar, aunque sea tan solo cinco minutos, cada día.....




Y... con esta música, los pies se mueven solos, ¿no?

lunes, 21 de mayo de 2012

Apalabrados



Hoy voy a hacer una confesión: estoy enganchada al Apalabrados. Sí, sí, tal cual. Tengo varias partidas empezadas y juego tanto con amigos como con desconocidos. Enganche total.

Pero el otro día pensaba, y espero que me perdonéis la “frivolidad”, que el Apalabrados (y, de hecho, cualquier juego) es un poco como la vida. Me explico: cuando empiezas la partida, te dan siete letras al azar y, con ellas, tienes que hacer tu primera tirada. A veces, te tocan malas letras y, otras veces, son muy buenas. En ocasiones, tiras tan rápido que no te das cuenta de que, si hubieras pensado un poco más, podrías haber hecho una jugada mejor. Otras veces, te desanimas por que no consigues hacer nada interesante. Pero, de pronto, consigues poner una “z” en triple letra y en triple palabra y te da un subidón por que sumas un montón de puntos. En cambio, en la siguiente tirada tienes sólo vocales y no consigues más de cuatro o cinco.

¿No sucede algo así con la vida? Comienzas “la partida” con una serie de habilidades que, de alguna forma, “te tocan”. Con ellas tienes también diferentes oportunidades que puedes aprovechar o perder. A veces, actúas muy rápido y te das cuenta de que hubieras tenido que pensar un poco más antes de hacerlo. Otras veces, no sucede nada interesante y, en cambio, en ocasiones la vida parece una fiesta.

Te toca lo que te toca. Tienes lo que tienes. Y tanto en la vida como en el Apalabrados puedes quejarte por tu mala suerte o estar agradecido e intentar sacar el máximo partido de lo que te ha tocado.

¿Y si nos tomamos la vida como un juego, dejamos de dramatizar y empezamos YA a divertirnos?

lunes, 14 de mayo de 2012

Ser nadie


René Magritte: "Decalcomanía"

Algo que nos aterroriza: ser nadie. Y, por eso, hacemos lo que sea para evitarlo. Hacemos concesiones, nos traicionamos, nos pisamos, engañamos y nos autoengañamos, utilizamos caretas y disfraces, nos emparejamos (al menos, ser alguien para alguien), nos separamos (ese alguien ya  no me considera alguien), salimos y entramos, trepamos y escalamos, subimos y bajamos. Y todo para ser alguien.

La RAE dice que “alguien” es “persona de alguna importancia”, a diferencia de “nadie” que es “persona insignificante”. Así pues, hay que ser “alguien” y es urgente. La necesidad de ser alguien nos condiciona, nos manipula, nos estresa pero, sin que nos demos cuenta, también nos recorta. Ser alguien es separarse, ser nadie es unirse. "¿Cómo evitar que una gota de agua se seque? Arrojándola al mar..." decía la maravillosa película Samsara.

Mi amiga Inma me contaba el otro día que su maestro la vacía. Y me encantó la metáfora por que creo que eso es lo que un buen maestro hace, vaciarte de ti mismo –o ayudarte a intentarlo- para que puedas llenarte de algo mucho más grande, para que puedas llenarte de Amor. Ser nadie para que puedas ser lo que verdaderamente eres.

"Podemos modelar la arcilla en forma de vasija, pero es el espacio creado lo que le otorga su valor. Podemos abrir puertas y ventanas en una casa, pero es la abertura lo que lleva la luz al interior. Podemos poner radios a una rueda, pero es el eje lo que la hace útil. Por tanto, sé como el espacio en el centro, sé Nada, de forma que puedas dar el Todo a otros", dice el Maestro Po. (Gracias a Sergio por descubrirme los vídeos del pequeño saltamontes).

Así pues, esta semana la buena noticia es que ser nadie es una buena, una muy buena noticia.

jueves, 10 de mayo de 2012

Happy


(Mil gracias, Siscu)

Mantén la mente despierta, abandona los resentimientos, las preocupaciones y la tristeza, escribe lo que deseas realmente, sal siempre que puedas, aprende a estar cómodo con tu cuerpo, da algo que valores para agradecer lo afortunado que eres, disfruta de la vida, enorgullécete de tus raíces, ilumina tu espíritu, acepta el doloroso pasado con desenfado (lo que no te mata te hace más fuerte), modera tu vida y sé flexible…

Son algunos de los consejos que se pueden encontrar en el libro “Happy. Secretos para la felicidad a través de las culturas del mundo” (Lonely Planet) que revela justamente eso: los secretos de la felicidad en diferentes países y tradiciones. Para aprender a ser feliz en cualquier lugar del mundo. No está mal, ¿verdad?

lunes, 7 de mayo de 2012

Un tiempo de sabiduría

 Las magníficas fotos son de BarcelonaMania Ruslan Shchegolkov


El pasado sábado tuve la suerte de asistir al Fòrum organizado por Fragmenta Editorial con motivo de su quinto aniversario. Fue una jornada enriquecedora en la que editores, autores y lectores pudieron compartir, sobre todo, inquietudes espirituales. Sería complicado resumir aquí las charlas a las que asistí o los pensamientos que éstas me sugirieron pero sí que hay una idea que me gustaría comentar por la importancia que creo que tiene. Una idea que apuntó Amador Vega cuando, citando a Mircea Eliade, dijo: “En el siglo XX, lo sagrado se ha refugiado en las formas profanas”, y remató Lluís Duch al lanzar la pregunta “¿Cómo en lo visible está, de alguna manera, presente lo invisible?” y terminar citando a Rilke: “Bienaventurados los que saben que detrás de todos los lenguajes está lo inexpresable”.

“Cantar no es más sagrado que escuchar el murmullo de un arroyo. Pasar las cuentas de un rosario no es más sagrado que simplemente respirar, los hábitos religiosos no son más espirituales que la ropa de trabajo” (Lao Tse), leí el otro día en Facebook.

“Estamos en un tiempo de síntesis”, decía Javier Melloni en el Fòrum de Fragmenta, “un tiempo de sabiduría que exige una gran madurez por parte de todos”. Y dicha madurez requiere que nos preguntemos cuál es el alimento que nutre nuestro espíritu, cuánto tiempo le dedicamos, con quién lo compartimos y a qué lo entregamos.

Un tiempo de sabiduría en el que es importante abrir los ojos, las manos, el espíritu y el corazón. Un tiempo de sabiduría para comprender e integrar cada vez más. Un tiempo que exige de nosotros compromiso y sacralidad.

“Cada paso que des en la tierra debe ser una plegaria.
La fuerza de un alma pura y buena
está en el corazón de cada persona
y crecerá como una semilla
cuando camines de forma sagrada.
Y si cada paso que das es una plegaria,
entonces caminarás siempre de forma sagrada.”
(Joseph Bruchac: La sabiduría del indio americano, Olañeta)

 “No creas que por que meditas silenciosamente, estás clarificando tu mente. La claridad de la mente no se alcanza con sólo huir del mundo. Cuando honres a tus padres, ames a tus hijos, ayudes a tus hermanos, seas leal con tus amigos, cuides a tu pareja con devoción, trabajes con alegría y asumas tus responsabilidades; cuando practiques la virtud sin exigirla primero a los otros; cuando, aunque comprendas las verdades supremas, mantengas una forma ordinaria de proceder, entonces -y sólo entonces- habrá claridad en tu mente y sabrás que tu forma de meditar es la correcta”. (Lao Tse)

Un gran sabio me dijo hace años que, aunque la montaña es una, existen múltiples senderos para alcanzar su cima. Descubrir lo sagrado en lo profano, sacralizar cada uno de tus pasos, tal vez no hará que asciendas más rápido pero sí que el camino sea mucho –MUCHO- más luminoso.