lunes, 30 de enero de 2017

Lo que te conmueve


(Imagen de Caitlin Worthington)



Lo que te conmueve

Lo que te conmueve es lo que te hace grande.
Lo que te conmueve es lo que te hace humilde.
Lo que te conmueve es lo que te voltea,
lo que te ubica, lo que te revela.

Lo que te conmueve es lo que te hace soñar.
Lo que te conmueve es lo que te hace volar
Lo que te conmueve rompe tus límites y
te permite ir más allá.

Lo que te conmueve es lo que te reconecta.
Lo que te conmueve es lo que te reintegra.
Lo que te hace sentir,
lo que te hace llorar,
lo que te hace reír.
Lo que te conmueve es lo que te hace AMAR.

Y
¿qué
es
lo
que
– a ti –
te
conmueve?


(Elena Almirall Arnal)

lunes, 23 de enero de 2017

Respeto



(Imagen de Kobi Refaeli)


El otro día me pasaron este maravilloso texto del blog Camino al Despertar y me gustó tanto que he querido compartirlo aquí:

“Nunca permitas que nadie, absolutamente nadie, perturbe tu paz y tu libertad. Cada vez que permites que alguien te maltrate, ya sea física, verbal o emocionalmente, estás permitiendo que perturbe tu paz y tu libertad, y por tanto, no aprendes la lección y ésta se va a ir repitiendo una y otra vez, con distintos escenarios y personas.

Nunca perturbes la paz y la libertad de otra persona, animal, la naturaleza, la madre Tierra, etc. Todo está vivo, y todo debe ser respetado.  Mientras perturbes la paz y libertad de otro ser sintiente, estás generando sufrimiento y karma, que se te devolverá en su momento; experimentarás el mismo sufrimiento que generaste, como ley de equilibrio y consecuencia.

El amor incondicional no se trata de decir a todo que sí...  No se trata de permitir todo. No se trata de que los demás perturben tu paz y tu libertad y tú no les pares los pies o te alejes de ellos. El amor incondicional te enseña a saber decir "No" cuando alguien está perturbando tu libertad. Busca siempre tu equilibrio, aprende a saber decir "No" y a alejarte de todo aquello y todos aquellos que no te respetan y que actúan manipulándote para que seas su esclavo.

Por otro lado, aprende a respetar la opinión de los demás, sobre todo de tus seres queridos. No quieras que ellos sean como tú quieres, y no quieras que hagan lo que tú deseas; respeta su paz, su libertad, y la vida te respetará a ti.

Pero recuerda: aquél que no se respeta a sí mismo, no sabe respetar a los demás y permite que no le respeten. Empieza por ti.”




lunes, 16 de enero de 2017

Considero un valor



Hoy quiero compartir un poema del grandísimo Erri de Luca, que encontré en la página de Facebook de Xavier (muchas gracias) y que me ha fascinado:

Valor

Considero un valor cada forma de vida, la nieve, la fresa, la mosca.
Considero un valor el reino mineral, la asamblea de las estrellas.
Considero un valor el vino mientras dura la comida, una sonrisa involuntaria, 
el cansancio del que ha dado todo, dos viejos que se aman.
Considero un valor aquello que mañana no valdrá nada 
y aquello que hoy todavía vale poco.
Considero un valor todas las heridas.
Considero un valor ahorrar agua, reparar un par de zapatos, 
callar a tiempo, acudir a un grito, pedir permiso antes de sentarse, 
mostrar gratitud sin recordar de qué.
Considero un valor saber dónde está el norte en una habitación, 
saber el nombre del viento que está secando la colada.
Considero un valor el viaje del vagabundo, la clausura de la monja, 
la paciencia del condenado cualquiera que sea su culpa.
Considero un valor el uso del verbo amar y la hipótesis de que exista un creador.
Muchos de estos valores no los he conocido.

(Erri de Luca)




viernes, 13 de enero de 2017

Insistamos en la belleza

“Siempre me impresionó que Pau Casals creía que debía llevar la cultura al mundo obrero, 
pero no iba allí y hacía una instalación con llaves inglesas y monos de trabajo, 
sino que iba allí y hacía un concierto de Bach. 
Es mucho más radical y transformador insistir en la belleza.”
(Jaume Plensa)

Insistir, insistir y no dejar de insistir en la belleza...


(A través de Galerías de Arte Barcelona, gracias siempre Edi…)

lunes, 9 de enero de 2017

Esta va por mis padres

(Imagen de google)


En un mundo cada vez más gris, es un milagro encontrar personas que todavía tengan ilusión. Mis padres la tienen. Y hoy quiero hablar de ellos porque me siento muy afortunada y porque quiero agradecerles no sólo el amor que me han dado y me han enseñado -tan grande y tan importante-. No sólo el apoyo, la confianza, la ternura, la lealtad, la complicidad, el cariño, la esperanza… hoy quiero escribirles -especialmente hoy- para agradecerles la ilusión. La que tienen y la que nos contagian.

La ilusión con la que, desde hace 50 años, van a comprar regalos para que el día de Reyes siga siendo mágico, la ilusión con la que los envuelven, con la que preparan el salón, con la que impiden que entremos hasta que estamos todos, la ilusión con la que nos miran cuando abrimos los regalos.

En los días que hace frío, en los días tristes o grises, en los días duros o desagradables sólo tengo que abrir la puerta de su casa para que todo cambie de color. Y sé que, en este mundo, a veces tan complicado, es un privilegio tener un lugar y unas personas que, día a día, te recuerdan la ilusión, la belleza y el amor. 

GRACIAS