lunes, 28 de noviembre de 2016

Que sea posible



Hace unos años, cuando mi sobrina Inés era muy pequeña y aún creía que todo era posible, decidimos que iríamos juntas de viaje al centro de la tierra, y estábamos tan contentas que hasta hicimos una lista de todo lo que allí encontraríamos. Después, esa lista se convirtió en uno de los microrrelatos de Historias que acaban aquí. Y algo más tarde, mi amigo, el grandísimo Rafael Turia, lo grabó con su maravillosa voz:


Esto me ha venido hoy a la cabeza porque son las dos de la mañana y estoy sentada en el sofá, mirando un cuarzo preciosísimo que encontré recientemente y que tiene un arcoíris alucinante en su interior. Como mi día ha sido un poco extraño, he pensado que podría meterme dentro de ese arcoíris, y explorar todos los mundos secretos que guarda.

Y, entonces, me doy cuenta: uno de los grandes regalos que me ha dado la vida es la capacidad de soñar y la certeza de que esos sueños pueden llegar a hacerse realidad.

Soñar que todo puede ser mejor.
Creer que es posible.
Saber que es posible.
Y hacer… que sea posible.


2 comentarios:

  1. Hermosos planes, sueños y historias por vivir, ojala que todos seamos capaces de soñar y de vivir aventuras.... hoy me despertado con la noticia de que han encontrado un vetusto piano en una playa de Malaga estoy deseando acariciar sus notas y navegar en sus melodías mas allá del arcoiris... Bonita semana Elena y compañia.

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    1. Que curiosa noticia ésta del piano, ya me contarás más... Buena semana, Ainhoa!! Un abrazo.

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