(Imagen de google)
“No te subestimes comparándote con los otros. Todos somos
diferentes y cada uno es especial.
No establezcas tus objetivos de acuerdo con lo que otros
consideran importante. Sólo tú sabes qué es lo mejor para ti.
No infravalores aquello más cercano a tu corazón. Aférrate a
eso como a la vida, ya que sin eso la vida carece de sentido.
No dejes que esa vida se te escape de las manos por vivir en
el pasado o por pensar en el futuro. Si vives tu vida día a día, vivirás todos
y cada uno de los días de tu vida.
No te des por vencido cuando todavía tienes algo para dar.
Nada está realmente terminado hasta el momento en que dejas de intentarlo.
No temas reconocer que no eres perfecto. Ese es el frágil
lazo que nos une a los otros.
No temas enfrentar riesgos. Es precisamente asumiendo riesgos
como aprendemos a ser valientes.
No dejes al amor fuera de tu vida y no digas que es imposible
de encontrar. La forma más eficaz de recibir amor es dar amor; la forma más
rápida de perder el amor es sofocarlo y aferrarse a él; la mejor manera de
conservar el amor es darle alas.
No pierdas tus sueños. Quedarse sin sueños es quedarse sin
esperanzas; vivir sin esperanzas es vivir sin un propósito en la vida.
No corras por la vida hasta terminar olvidando no sólo dónde
has estado sino también adónde vas. La vida no es una carrera sino un viaje que
debe ser disfrutado a cada paso.”
(Susan
Polis Schutz: "Tesoros de la Vida")