La sabiduría del mulá Nasrudín

(Cuento encontrado en el blog de Adriana)

Esta semana, la buena noticia viene en forma de cuento para reflexionar. Es uno de los cuentos de la tradición sufí, sobre el mulá (maestro) Nasrudín:

"Al mulá Nasrudín le concedieron una entrevista en una compañía naviera. El director le dijo: "Nasrudín, es un trabajo peligroso. Algunas veces el mar se embravece. Si estás en medio de una gran tormenta, ¿qué harías con tu barco?".

Él contestó: "Ningún problema. Simplemente bajaría el mecanismo de defensa que tienen todos los barcos, pesas, enormes pesas que mantienen el barco estable incluso en medio de una gran tormenta".

El director volvió a preguntarle: "¿Y si viene otra gran tormenta...? Él contestó de nuevo: "Ningún problema. Volveré a bajar otra gran pesa". En el ambiente marino a esas pesas las llaman lastres.

El director volvió a decirle: "Y si viene una tercera tormenta, ¿qué harías?". Y él volvió a contestar: "Ningún problema... más lastre".

El director no sabía qué hacer con aquel hombre. Le preguntó: "¿De dónde sacas todo ese lastre?". Y el mulá Nasrudín le contestó: "¿Y de dónde saca usted todas esas tormentas?"

(De la misma fuente... La mente crea problemas, levanta tormentas, luego busca el lastre y también crea ese lastre...)".

Cara a cara

(Mil gracias a Colleen por la información)

Rostros inmensos para remover conciencias. Es el trabajo del fotógrafo francés JR –también conocido como el fotógrafo clandestino- que acaba de ser galardonado con el premio TED.

Los diferentes proyectos de este fotógrafo anónimo tienen un denominador común: abrir los ojos -¿el corazón?- del espectador, que se haga preguntas, que se cuestione certezas, que se enfrente a sus miedos. Algo, hoy en día, casi subversivo: que nos veamos los unos a los otros, que nos redescubramos y que aprendamos a respetarnos e, incluso, -¿por qué no?- a amarnos.

Y JR lo hace a través de primeros planos gigantescos que pega en las calles a modo de póster para que sean accesibles a todo el mundo (aunque, poco después, sean retirados por la policía). Arte callejero con un objetivo claro: invitarnos a la reflexión.

Algunos de sus proyectos son “Los surcos de la ciudad”, un homenaje a los ancianos cuyos rostros son la memoria viva de una ciudad; “Las mujeres son héroes”, sobre la situación de la mujer africana; o “Cara a cara”, que retrata a palestinos e israelíes que hacen un mismo trabajo con la idea de ponerlos frente a frente en ambos territorios para que se reconozcan, se acerquen y –a ser posible- se reconcilien, ¿no es genial?

Y tú, ¿necesitas un póster gigante del “otro” para ser capaz de verlo?

Gota sobre gota

(Imagen de google)

Para M.

Dice mi amiga Gloria que con amor y paciencia se puede conseguir cualquier cosa. Y me envía un sorprendente vídeo (¡mil gracias!) en el que una submarinista juega, acaricia y besa a los tiburones. Impresionante.





Dice Macaco que, “gota sobre gota, somos olas que hacen mares; que somos una marea de gente, todos diferentes, remando al mismo compás”. Y los alumnos y profesores del colegio El Chaparral se hacen eco de su canción y realizan un vídeo genial que demuestra que, unidos, podemos hacer cosas realmente chulísimas. (Mil gracias a Misón por el vídeo).

Un gran aplauso

Encontré este vídeo en el blog de Pablo…



… y, además de hacerme sonreír, me hizo reflexionar. Creo que no hacen falta demasiadas palabras.